La Sala N° 4 de la Cámara Federal de Casación Penal, integrada por los jueces Juan Carlos Gemignani, Gustavo Hornos y Mariano Borinsky, confirmó en todos sus términos la condena para diez policías y dos civiles por el transporte y encubrimiento de un cargamento de 1.662 kilos de marihuana hallados en Arroyo Leyes, la madrugada del 2 de noviembre de 2014. 

“No surgen dudas sobre la participación y responsabilidad criminal de los imputados en los hechos llevados a juzgamiento”, destacó el Dr. Hornos, quien consideró que “no se advierten fisuras” en la sentencia.

El 22 de junio del año pasado, el Tribunal Oral Federal de Santa Fe -María Ivón Vella, Luciano H. Lauría y José María Escobar Cello- dictó sentencia condenatoria para el policía Alejandro “Aguja” Agüero, quien recibió la pena más alta: 12 años de cárcel por el delito de transporte de estupefacientes doblemente agravado (por su condición de policía y por tratarse de un delito especialmente grave). Con él fue considerado partícipe principal un civil que a su vez era su padrastro, Juan Carlos Villalba, que recibió la pena de 7 años. Los jefes policiales Cristian Fabio Hang y Martín Ángel Díaz recibieron 6 años de pena y multas de $ 25.000 cada uno por encubrir el accionar delictivo y falsear el acta de procedimiento. Mientras que Luis Gabriel Cantero -el otro civil- fue condenado a 4 años de prisión por tenencia de estupefacientes con fines de comercialización en una causa anexa a la principal. Los otros siete policías de menor rango -Matías Zoratti, Claudia Moreira, Mauro Ruoppolo, Fabián Manjka y Luciano Astrain, Iván Papini y José María Murguía- fueron sentenciados a dos años en suspenso por haber suscripto un acta cuyo contenido sabían falso.

Transporte

La sentencia de fecha 3 de julio, publicada por el Centro de Información Judicial (CIJ), se hace eco de las sucesivas apelaciones realizadas por cada uno de los abogados defensores de los doce imputados. Así, la casación respondió todos los planteos formulados por los abogados Jorge Pedraza (por Villalba); Claudio Torres del Sel y Natalia Giordano (por Hang); Néstor Oroño (por Zoratti, Moreira, Ruoppolo, Manjka y Astrain); Fernando Sánchez (por Papini y Murguía); Ignacio Alfonso Garrone (por Cantero); y José Ignacio Mohamad y Horacio Jorge Paulazzo (por Agüero y Díaz); así como el rechazo a los planteos defensivos formulado por el Fiscal de Cámara, Gabriel Pérez Barberá.

Para analizar el caso el camarista Gemignani -quien tuvo a cargo el primer voto- comenzó por evocar los hechos y delitos atribuidos a cada uno de los condenados en el requerimiento de elevación a juicio del fiscal de primera instancia.

En el caso de Agüero y Villalba, los situó en el acto de “haber transportado” 1.662 kilos de marihuana, que fuera secuestrada en la madrugada del 2 de noviembre de 2014 en el doble fondo de un container con la inscripción Hamburg Sud, que quedó empantanado en un basural que está al fondo de la calle N° 62 de Arroyo Leyes, al oeste de la Ruta Provincial N° 1, a la altura del km 14. Y haber descargado una cantidad indeterminada de la misma sustancia en otro camión más pequeño, un Mercedes Benz rojo, que era manejado por Villalba.

El 22 de junio de 2017 el TOF de Santa Fe condenó a diez policías y dos civiles a penas que van de los 2 a los 12 años de cárcel por transporte de estupefacientes, encubrimiento y falsificación de documento público.Foto: Archivo El Litoral / Flavio Raina

Encubrimiento

A los comisarios Hang y Díaz les reprochó haber omitido individualizar a Agüero y Villalba en el marco de la maniobra delictiva antes descripta; y que lejos de descubrir, ayudaron a ocultar, a punto que estando ya detenidos favorecieron su evasión. Además, fueron considerados responsables de “haber sustraído parte del material estupefaciente incautado a bordo del camión Merceces Benz” que debía servir como prueba; y por último, haber insertado datos falsos en el acta de procedimiento.

Respecto de los siete policías de menor rango -Comando de la Costa, Comisaría de Rincón y Subcomisaría de Arroyo Leyes, etc.- fueron acusados por haber avalado con su firma la introducción de datos falsos en el acta.

En cuanto al otro civil -Cantero-, se lo responsabilizó por el delito de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización tras el secuestro de 141 gramos de marihuana, en un allanamiento realizado en su casa el 5 de junio de 2015 cuando los investigadores iban en busca del camión faltante (Mercedes Benz chico). El mismo día, también fue allanada la casa de Villalba -que estaba en libertad-, donde también se secuestró droga (846 gramos de marihuana).

“Sin fisuras”

Gemignani ratificó punto por punto lo actuado por el tribunal de primera instancia, ante cada cuestionamiento defensivo. “Como colofón, cabe puntualizar que los agravios de los impugnantes sólo evidencian una opinión diversa sobre las cuestiones debatidas y resueltas, decisión que asimismo cuenta con los fundamentos mínimos, necesarios y suficientes, que impiden su descalificación como acto judicial válido”, cerró.

En la misma línea, el juez Gustavo Hornos dijo en su segundo voto que “las manifestaciones expuestas en las presentaciones casatorias, no resultan suficientes para controvertir los dichos de los testigos de la actuación, las escuchas telefónicas, de los registros fílmicos y fotográficos, y las demás pruebas que acreditan la versión inculpatoria, en tanto no obra prueba que logre corroborar aquellas versiones esbozadas por los recurrentes”.

“En el desarrollo de la sentencia atacada no se advierten fisuras” ya que la sentencia trabajó sobre “las pruebas e indicios serios, precisos y concordantes”, destacó el camarista. “No surgen dudas sobre la participación y responsabilidad criminal de los imputados en los hechos llevados a juzgamiento”, completó.

Finalmente el juez Mariano Borinsky adhirió con su voto, dándole unanimidad a la sentencia.

FUENTE: EL LITORAL