Con una producción estimada en 161 millones de toneladas de soja y 136 millones de maíz si el clima se normaliza, Brasil y la Argentina podrían concretar la segunda mayor cosecha de la historia, levemente por detrás de la obtenida en la campaña anterior. La cosecha de maíz en Brasil, tercer mayor productor mundial por detrás de Estados Unidos y de China, alcanzaría 95 millones de toneladas en la campaña 2017/18, según las estimaciones del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA). Este registro se posicionaría como la segunda mayor cosecha de la historia del país, por detrás de las 98,5 millones obtenidas en la campaña previa. A principios de octubre, la siembra del cultivo de primera, cosecha que representa alrededor de un tercio de la producción del maíz brasileño, cubrió el 19% de la superficie prevista para los estados del centro-sur. Si bien se estima que la superficie destinada al cereal de primera caería alrededor de un 10% en la presente campaña, el área total a implantarse con maíz sería de 17,7 millones de hectáreas, un 1% más que el máximo implantado en la campaña anterior. En cuanto al cultivo de soja, se estima que Brasil, segundo mayor productor mundial detrás de Estados Unidos, produciría 107 millones de toneladas en la campaña 2017/18, por debajo de los 114 millones del ciclo anterior. El clima seco y cálido predominante durante los últimos días en gran parte del área agrícola brasileña permitió avanzar sobre la siembra de solo un 1,5% de los 34,7 millones de hectáreas proyectadas para la presente campaña. Este valor se ubica por debajo del 4,8% que se registraba a igual altura del año pasado y del 2,3% promedio de las últimas cinco campañas. Con un 2% por encima del área sembrada en el ciclo 2016/17, la superficie destinada a soja en la campaña 2017/18 sería la mayor de la historia del país. Siembra en la Argentina Por el lado de la Argentina, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) estima que la superficie destinada a maíz en la presente campaña alcanzaría 5,4 millones de hectáreas y la producción ascendería a 41 millones de toneladas, posicionándose como la más alta de la historia de nuestro país. Con retrasos en la siembra de los lotes tempranos por falta de humedad o excesos hídricos, el área implantada a principios de octubre solo cubrió el 9,5% de la superficie proyectada, muy por debajo del 21,5% registrado a igual altura del año pasado y del 12% del promedio histórico. En lo que respecta a soja, la Argentina recortaría el área a sembrar por segundo año consecutivo. Según las estimaciones de la BCBA, nuestro país implantaría 18,1 millones de hectáreas en la campaña 2017/18, 10% por debajo de las 20,1 millones sembrada en el ciclo 2015/16 y 5,7% menos que las 19,2 de la campaña anterior. La producción se estima en 54 millones de toneladas, un 6% por debajo de la obtenida en el ciclo 2016/17, pero próxima a los 55,4 millones promedio de las últimas cinco campañas. Frente a este escenario y de cara al nuevo ciclo comercial, el mercado de futuros y opciones es una buena alternativa para tomar coberturas de precios. Para el cereal, teniendo en cuenta la baja volatilidad vigente hoy en Chicago, se podría combinar la venta de maíz nuevo a 150U$S/t con una opción call de precio de ejercicio cercano pagando una prima no mayor a los 3U$S/t. En cuanto a soja, resultan interesantes las oportunidades que ofrece el mercado local. Con una inversión del orden de los 4U$S/t se podría asegurar un piso de venta de 250U$S/t para la nueva cosecha. Fuente: Pablo Pochettino. Agroeducación