El gobernador Miguel Lifschitz ratificó ayer que el socialismo se encolumnará detrás de una "estrategia común" en el seno del Frente Progresista (FPCyS) para las elecciones de 2019, al tiempo que procuró correr del centro de la escena supuestas desavenencias con su antecesor y actual jefe partidario a nivel nacional, Antonio Bonfatti.

El adelanto de La Capital acaparó el diálogo del mandatario provincial con la prensa, que tuvo lugar tras un acto oficial que compartió con el intendente de la ciudad de Santa Fe, José Corral, quien no ahorró elogios al jefe de la Casa Gris. Un dato político que no pasó desapercibido.

"Se trató de un reconocimiento al esfuerzo que está realizando el gobierno provincial en la ciudad de Santa Fe", devolvió gentilezas el socialista acerca del discurso de Corral, radical enrolado en Cambiemos.

Luego de restarle importancia a las presuntas diferencias con Bonfatti, Lifschitz dio señales concretas de que, más allá de "los matices y las opiniones" en la coalición oficial, todos los cañones apuntan a retener el poder en la provincia el año próximo.

"Nunca tuvimos ninguna pelea. Al contrario, siempre trabajamos juntos. Lógicamente, a veces hay matices y opiniones, pero somos parte de un frente progresista y democrático que asume las diferencias y que trata de coordinar un trabajo en común y un proyecto colectivo", fundamentó. Y agregó: "Todos los integrantes del socialismo y del FPCyS tendremos una estrategia común para las elecciones de 2019".

Asimismo, el gobernador desestimó toda chance de alejarse del Partido Socialista (PS). "En absoluto, llevo más de 40 años en esta fuerza y no sería el momento oportuno para nuestro espacio pensarlo de ese modo, es absurdo. Además, si hay algo que uno puede cuestionar en la política de los últimos años son los panqueques o los traidores", argumentó.

Respecto de si respaldaría una candidatura de Bonfatti a gobernador de Santa Fe, Lifschitz subrayó: "Vamos a acompañar las candidaturas que establezca el Frente Progresista en su momento".

El mandatario provincial también descartó la caída de la propuesta oficial de reforma de la Constitución santafesina. "Los proyectos están en la Legislatura para discutirse. Sería extraño que los legisladores decidieran no tratar las iniciativas que están, justamente, ingresadas para ser debatidas", advirtió.

En esa línea, Lifschitz prosiguió: "Todos los santafesinos que han participado, que son miles y que hicieron sus aportes, merecen que los legisladores discutan los temas y brinden sus posiciones. A partir de allí, sabremos si hay o no reforma. También sabremos si seguimos siendo la provincia más atrasada en materia constitucional del país o si, definitivamente, daremos un paso adelante".

Sobre la posibilidad de alcanzar un acuerdo político para que la reforma constitucional salga el año próximo, Lifschitz indicó: "Siempre que se avance con los temas, estaré satisfecho. Son reivindicaciones muy importantes, para las cuales hemos esperado más de 30 años. En la medida en que haya consenso para impulsarla, estaré conforme".

Por último, el gobernador replicó al titular del radicalismo santafesino, Julián Galdeano, quien días atrás habló de sumarlo a un frente no peronista junto a sectores afines a Cambiemos.

"Cada uno arma y desarma frentes como puede. Nosotros tenemos un frente conformado que está gobernando y que se mantendrá para las próximas elecciones. El FPCyS es muy sólido y lo que estamos discutiendo es, si a partir de esa base, podemos ampliar el espectro de representación. Eso, obviamente, implica a sectores del peronismo e independientes y alguna organización social. Por supuesto que, si algún dirigente de Cambiemos quiere sumarse, no pondremos reparos mientras adhiera a nuestro programa político", concluyó.

FUENTE: EL LITORAL