Tras la huelga de 72 horas realizada la semana pasada, Conadu Histórica definió continuar las acciones de protesta por la recuperación real del salario de los docentes universitarios, en un marco "de unidad" con el Frente Sindical de Universidades Nacionales. La medida de fuerza de 48 horas fue anunciada para este martes 20 y miércoles 21 de agosto, sin asistencia a los lugares de trabajo.

"Ante la negativa por parte del Ministerio de Capital Humano de abrir una verdadera discusión paritaria y la persistente imposición de aumentos irrisorios, se vuelve fundamental seguir visibilizando la situación y profundizar la unidad con la comunidad universitaria en su conjunto. El plenario ratificó la decisión de realizar una nueva marcha en defensa de la universidad pública para el mes de septiembre", informa en un comunicado la Conadu Histórica, que es la confederación a la que responde Adul, gremio docente local.

Los reclamos son por una recuperación real del salario, la restitución y pago del Fonid, "no" al Impuesto a las Ganancias y actualización de las jubilaciones.

Por otra parte, el plenario rechazó la aprobación en la Cámara de Diputados de la Nación de la Educación como "servicio esencial" entendiendo que "atenta contra el derecho a la protesta de los trabajadores del sistema educativo. Esto agravado por un incremento de la brecha entre aumento salarial y aumento de la inflación que, como hemos señalado, supera en general el 57% y llega al 101,8 % en el cargo inicial".

El jueves 22 de agosto, además, está prevista una nueva reunión del Frente Sindical de Universidades Nacionales, del que participan Conadu, Conadu Histórica, Ctera, Fedun, Fagdut, UDA y Fatun. Se analizarían más paros y la posibilidad de realizar una nueva marcha nacional como la que tuvo lugar, con alto impacto en todo el país, el pasado 23 de abril.

Negociación estancada

Cabe recordar que el Gobierno nacional se reunió con los representantes sindicales de los docentes y no docentes universitarios el pasado viernes 16, antes de la medida de fuerza anterior. Durante el encuentro se les ofreció a los sindicatos "un aumento del 3% para agosto y un incremento del 2% para septiembre, tomando como base de referencia la pauta general del Estado".

No obstante, tras "no llegar a un entendimiento", las partes acordaron crear "una Comisión Técnica Tripartita para buscar acercar las diferencias señaladas por los gremialistas, con la oferta del Gobierno". Hasta el momento, no hay novedades sobre la conformación de ese espacio.

Los gremios nucleados en el Frente Sindical de Universidades Nacionales no sólo ratificaron las medidas de fuerza que ya se cumplieron, sino que el pasado viernes, anunciaron nuevos paros para esta semana que se inicia. "Es absolutamente insuficiente esta propuesta", había dicho Francisca Staiti, secretaria general de Conadu Histórica.

Por su parte, el propio rector de la UNL, Enrique Mammarella salió a confirmar que las categorías más bajas quedaron con los salarios "relegados". El problema radica en dos cuestiones -había dicho días atrás-. Una es la inflación, pero también un hecho trascendental del Gobierno en una decisión: por un lado, en lo que es la garantía salarial, de dejarla fija a valores del año pasado; y, por otro lado, de quitar el Fonid. Entonces, las categorías más bajas, no solo que no han alcanzado el ritmo de la inflación sino que han quedado relegadas porque han perdido una gran parte de su componente salarial, al no estar estos complementos".

CIN y Adorni, por los gastos de funcionamiento

El Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) manifestó su "satisfacción" tras la aprobación en la Cámara de Diputados, el pasado jueves 15, del proyecto de Actualización de Gastos de Funcionamiento, Salarios y Becas Estudiantiles, que contó con el respaldo de los bloques de la UCR, Encuentro Federal y Unión por la Patria. Este avance legislativo, que ahora espera tratamiento en el Senado, fue visto como "un sustancial paso para todo el sistema universitario nacional".

El proyecto estipula que el Gobierno nacional actualice los presupuestos para gastos de funcionamiento, investigación y extensión en las universidades, cada dos meses según la inflación informada por el Indec.

A través de un comunicado, el CIN agradeció a "diputados y diputadas que trabajaron responsablemente para aprobar este proyecto, por su apoyo constante al sistema universitario público que da esperanzas en un año muy complejo, por poder otorgar, finalmente, a la universidad pública la jerarquía y centralidad que la Nación requiere y que la sociedad argentina reclamó en la conmovedora manifestación de apoyo en abril de este año".

Tras ponerse a disposición de los senadores y solicitarles un "tratamiento urgente", el CIN considera que "necesitamos revertir con celeridad la angustiante situación salarial que atraviesan docentes y no docentes de las universidades, y recuperar la normalidad en el desarrollo de nuestras actividades, para que la universidad siga aportando a un país que, por sus problemas, necesita mucho de ella".

Al día siguiente de la media sanción, el vocero presidencial Manuel Adorni señaló que Milei está decidido a frenar todo aquello que afecte al equilibrio fiscal y que, si el proyecto aprobado en Diputados consigue promulgarse, "será analizado el veto", aunque indicó que por el momento "hay que ser muy respetuosos" hasta tanto la normativa tenga sanción definitiva.

Alerta desde la UBA

Un informe de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Buenos Aires (UBA) alerta que, de no mediar una recomposición salarial importante antes de fin de año, los salarios de docentes y no docentes universitarios caerían a niveles del año 2005. Además, días atrás publicó en sus redes sociales tres videos bajo el lema "salarios dignos para que los profesores puedan estar en las aulas". Los cortos -que generaron impacto en la red X- presentan tres escenarios en los que docentes universitarios se encuentran trabajando en ocupaciones que nada tienen que ver con sus especialidades. Un físico que trabaja de mozo, un ingeniero de taxista y una psicóloga que atiende un call center, van explicando a los clientes ocasionales temas complejos de sus respectivas incumbencias.

Fuente: El Litoral