En declaraciones al programa “El primero de la mañana” de LT8, el responsable de la salud pública en la ciudad remarcó este lunes sobre la realidad de pandemia en Rosario: “No es un hecho aislado. Llevamos más de 16 semanas sostenidas con tendencia a la baja y estabilidad de todos los índices sanitarios. Bajó la transmisión comunitaria, de las complicaciones, de las internaciones. Ocurrió lo mismo con la tasa de reproducción, que en un tiempo estuvo en el 58 ó 60 por ciento de PCR positivas. Hoy ese porcentaje es del dos ó tres por ciento”.

“Claramente hay una disminución del número de contagios que se traduce también en la ocupación de camas y la otra variable positiva es el alto porcentaje de personas vacunadas”, expresó el funcionario municipal.

   

Pero ante ese panorama favorable y frente a los anuncios realizados desde el gobierno nacional de ir flexibilizando a partir del 1º de octubre, Caruana remarcó que desde desde el municipio “ se planteó la necesidad de ir gradualmente hacia mayores amplitudes. Es innegable que la evolución favorable de la pandemia hace que se pueda avanzar en flexibilizar aún más las actividades en relación a los aforos”.

“Pero planteamos la necesidad de no contraponer un elemento que tanto nos costó asimilar como el uso del barbijo. El uso del tapaboca no va en detrimento con la flexibilización de mayores actividades sociales o de encuentros. No podemos adelantarnos a hablar de final de pandemia, cuando es una etapa mucho más controlada, porque los pronósticos taxativos quedaron que después se desdibujan. Es importante avanzar en más actividades, pero hacerlo con todos los cuidados”, agregó.

El regreso a los boliche

El secretario de Salud dijo que "será un desafío" para todos el regreso a la actividad de los boliches. "Todo lo que se pueda priorizar de espacios y aperturas de estos rubros, y se puede utilizar el espacio al aire libre y con un aforo de público. No sé si será la semana próxima o se aumentarán las actividades que ya están. Todo lo que aparezca como nuevo debería hacerse con un aforo progresivo de incremento y con muchos controles para evitar daños. La masividad de estos eventos hace difícil el control".

Fuente:La Capital