Ante la creciente suba de precios, el gobierno decidió cerrar las exportaciones de carne por 30 días hasta que el mercado interno se ordene. Las autoridades nacionales comunicaron anoche la medidas a los representantes de los frigoríficos exportadores nucleados en el consorcio ABC.

El precio de la carne prácticamente se duplicó en un año, impulsado entre otras cosas por un fuerte aumento de las exportaciones, fundamentalmente a China. Este incremento llevó las ventas al exterior a una participación histórica como destino de la producción cárnica, al elevarla por encima del 25%. Ese avance restó peso al consumo interno, que además viene de caer 10 kilos por habitante por año en el último lustro.

“Vengo decidido a atacar ese tema, me preocupa mucho porque es inexplicable, sinceramente no hay ninguna razón, más que el aumento del consumo, para explicar esos aumentos que se dieron en marzo y abril”, analizó Fernández durante una entrevista con el canal C5N. Dijo que “celebra” que Argentina “exporte carne” pero no que “hagan pagar a los argentinos el precio que le hacen pagar por la carne, y que les den una migaja de 8 mil toneladas de carne cuando acá se consumen 200 mil por mes”, reseñó. Se refirió así al acuerdo firmado para llevar a las góndolas once cortes populares a precios más accesibles.

Fernández lamentó que los empresarios no se hayan comprometido con el cumplimiento de los acuerdos alcanzados en las mesas sectoriales armadas a principaios de año. Y contrastó esa actitudo con la de la representación de los trabajadores. “Los sindicatos están en busca de un acuerdo social y han sido muy moderados en sus pretensiones, quiero que este año el salario real crezca, todos cerraron cinco puntos más que lo que proyectaba el presupuesto como inflación, y evidentemente la inflación se ha acelerado más”, expresó el mandatario.

A ese respecto, sostuvo que “no han sido la causa de la mayor inflación ni la presión salarial ni el aumento de tarifas, que no existió tampoco, ni un aumento enorme y significativo de los combustibles; lo que ha pasado es que algunos han dicho ‘aprovechemos el momento’ y han ganado lo que no debían ganar”, completó.

Hace menos de un mes, el gobierno instrumentó un registro de exportaciones de carne para tener mayor control sobre los despachos al exterior. Para vender, los exportadores deben presentar primero una Declaración Jurada de Operaciones de Exportación de Carne (DJEC).

El antecedente de 2006

El antecedente de las exportaciones de carne fue el 2006, cuando el ex presidente Néstor Kirchner tomó esa medida por seis para frenar el aumento de precios. También subió las retenciones al 15%. Luego, en 2008, tras la crisis por las retenciones móviles a la soja, el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner instrumentó los Registros de Operaciones de Exportación (ROE) que limitaron la actividad exportadora.

Un reciente informe de la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de la Argentina (Fada) indicó que el precio final de la carne, en promedio, se conforma por una cadena que se explica en un 30% por la cría, un 27% por el feedlot, un 6% por el frigorífico y 28% por impuestos.

Más allá del aumento de la demanda internacional, los precios de la cadena cárnica también están influenciados por el aumento de los costos, como el del maíz, que tocó récords en el mercado internacional.

En un informe de Lote de Noticias, el portal del Rosgan, se analizó el consumo de carne vacuna en marzo, con un saldo equivalente a 48,6 kg per cápita. Ese consumo fue levemente superior al de marzo de 2020 (47,6 kg) e, incluso, al de marzo de 2019 (48,3 kg). Pero en la serie más larga, hay una tendencia al menor consumo de carne vacuna”.

Por el lado de la producción, hasta el 2009/2010 se producían en promedio unas 275 mil toneladas mensuales, luego se cayó a 200 mil, producto de una fuerte liquidación. Actualmente, está entre 250 y 260 mil toneladas por mes. Al observar la curva de la exportación, pareciera ser la variable que explica plenamente la caída del consumo.

En los años sucesivos a la gran liquidación, se recuperó el consumo, fluctuando en torno a los 60 kg per cápita, a expensas de una aniquilación total de la exportación en uno de los períodos más adversos para

este sector.

En los últimos años, en especial a partir de 2018 cuando comenzó a plasmarse esta explosión de demanda externa proveniente de China, la exportación crece muy fuerte, casi triplicando el volumen embarcado en los últimos tres años. El consumo, esta vez, terminó cediendo unos 10 kg per cápita en este último período. La puja distributiva está a full.

Fuente:La Capital