"Acordamos una mirada común en todo el sistema educativo argentino", sostuvo Trotta luego de realizar una reunión por videoconferencia con los ministros de Educación de todas las provincias del país y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (Caba). Los únicos distritos que no adhirieron con su firma a la resolución conjunta fueron Caba y la provincia de Mendoza.

El ministro aseguró que "nadie celebra la suspensión de la presencialidad" y remarcó que "no se ha expresado el Estado nacional sino todo el sistema educativo argentino", con la "diferencia de realidades que transita cada uno de los puntos de la Argentina".

Trotta indicó que la resolución reconoce "la posibilidad de la presencialidad administrada y la suspensión de clases presenciales en las regiones que estén en alarma epidemiológica", situación en la que se encuentran los departamentos santafesinos de Rosario y San Lorenzo.

Si bien Santa Fe adhirió a la resolución, la administración de Omar Perotti ya elevó al gobierno nacional su pedido para que se revea la inclusión de Rosario y San Lorenzo en la categoría de alarma epidemiológica.

   

La ministra de Educación de Santa Fe, Adriana Cantero, sostuvo que la provincia planteó la posibilidad de "volver a valorar los indicadores de estos dos departamentos y si hay indicios de mejora sanitaria".

"Vamos a trabajar por la presencialidad pero todos los que quieren presencialidad tienen que comprometerse a cuidar lo que pasa afuera de las escuelas", indicó Cantero tras la resolución del Consejo de Educación aprobada por mayoría.

La ministra destacó que también se abordó la necesidad de que "cuando la alarma sanitaria se declare y estemos en una situacion crítica, se reduzca la presencialidad en la menor expresión geográfica posible".

Trotta insistió en que la decisión de las 22 provincias demuestra "la voluntad de priorizar la educación con presencialidad siempre que la realidad epidemiológica lo haga posible".

La pelea con Caba

La reunión virtual de los representantes de Educación de todo el país llegó horas después de que la Corte Suprema respaldara la autonomía de Caba para continuar con las clases presenciales.

Trotta elevó los lineamientos para realizar una presencialidad administrada (cuando deje de estar en vigor el actual DNU) en las regiones del país con más contagios de Covid-19. Soledad Acuña (por Caba) y José Thomas (director general de escuelas de Mendoza) se negaron a aceptar las condiciones. Después de tres horas de reunión, el resto de las provincias estuvo de acuerdo y acompañó la resolución nacional.

Fuente:La Capital