Los contagios aun no cedieron en los países más afectados y los rebrotes comenzaron a  preocupar cada vez más a aquellos que creían haber superado lo peor.

La pandemia del COVID-19 volvió a establecer la necesidad de revisar la reaperturas y a poner en riesgo o a modificar las condiciones de procesos electorales.

El mundo: casos y muertes por el COVID-19

El mundo acumuló ya más de 11,32 millones de casos confirmados y 532.340 muertes por la enfermedad, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).

El aumento de los contagios no cesó en los tres países más castigados, respectivamente Estados Unidos (más de 2,93 millones), Brasil (más de 1,62 millones) y ahora India, que con 697.413 dejó atrás a Rusia, que contabilizaba 686.777.

A estas preocupaciones se sumó la originada por la cantidad cada vez mayor de países que habían reiniciado total o parcialmente sus actividades después de haber superado el pico de contagios y en los que, sin embargo, se detectaron rebrotes que encendieron alarmas y motivaron la vuelta de algunas restricciones.

España

Uno de esos casos es el de España, que sumó dos nuevos pequeños brotes en el sur del país y computaba 47 brotes activos. 

En Galicia, además, la prensa local manifestó incertidumbre acerca de la realización de las elecciones regionales previstas para el domingo próximo. 

Bolivia

También en Bolivia pusieron en duda las elecciones presidenciales, en este caso desde el propio gobierno, previstas para el 6 de septiembre tras ser aplazadas desde el 3 de mayo precisamente por la pandemia.

Uno de los candidatos presidenciales, el médico y pastor presbiteriano Chi Hyung Chung, informó hoy en Twitter que dio positivo de COVID-19.

En contra de las recomendaciones, República Dominicana y Tokio

Aún así, la pandemia no fue obstáculo para que el domingo se celebraran elecciones generales en la República Dominicana -el país con más contagios y muertes en Centroamérica y el Caribe- y municipales en Tokio, en medio de un rebrote detectado en los últimos días en Japón.

fuente: sin mordaza