En los últimos años, la incidencia de melanoma, un tipo de cáncer de piel, experimentó un preocupante aumento a nivel mundial. Según la dermatóloga Silvana Leurino, este incremento se está convirtiendo en una "epidemia silenciosa", ya que no recibe la atención suficiente a pesar de su crecimiento alarmante.

En una entrevista con CyD Litoral, la Dra. Leurino explicó que “el melanoma se origina en los melanocitos, las células responsables de producir el pigmento de la piel, conocido como melanina. Esta enfermedad se manifiesta principalmente en forma de nuevas manchas en la piel, que suelen tener bordes irregulares, múltiples colores o un rápido crecimiento. Es crucial prestar atención a estos cambios en la piel, ya que pueden ser indicativos de melanoma”.

La profesional enfatizó sobre la importancia del control dermatológico regular, especialmente para aquellas personas con características de riesgo. “Entre estos factores de riesgo se encuentran la tez muy clara, ojos claros, cabello rubio o pelirrojo, antecedentes personales o familiares de melanoma o de otros tipos de cáncer de piel, quemaduras solares durante la infancia, exposición a camas solares y la presencia de numerosos lunares o lunares irregulares”.

Cómo detectarlo

La dermatóloga informo que “generalmente se manifiestan sobre la piel sana, no sobre un lunar ya tenés sino que aparece de golpe una mancha que tiene forma irregular bordes irregulares muchos colores o que cambia de color de golpe empieza a crecer y crece con mucha más velocidad que lunar común, por eso hay que prestarle mucha atención a este tipo de cosas”.

“Pero en una tercera parte puede ser de un lunar que se tenga y se vaya alterando. Por eso, insistimos en el control de la piel, no solo de los lunares, que el paciente ya tiene sino el control de la piel en general para ver que no aparezcan lesiones nuevas”, recomendó la dermatóloga. Quién además recalcó que “para detectar el melanoma de manera temprana se debe realizar un control de la piel al menos una vez al año, especialmente antes de la exposición al sol durante el verano”.

Cuando un paciente presenta una lesión sospechosa, es fundamental realizar una biopsia para confirmar el diagnóstico de melanoma. Leurino destacó que “el tratamiento principal para el melanoma es quirúrgico y que, cuando se detecta de manera temprana y está localizado en la piel, la extirpación del tumor puede ser curativa en el 85% de los casos”.

Sin embargo, en casos más avanzados, puede propagarse a otras partes del cuerpo, lo que requiere tratamientos adicionales. Por esta razón, la detección temprana y el tratamiento oportuno son cruciales para mejorar el pronóstico de los pacientes con melanoma.

La profesional también mencionó la importancia de realizar controles dermatoscópicos, que permiten examinar de manera detallada las lesiones cutáneas y detectar cambios sutiles que podrían indicar la presencia de melanoma. Estos controles, que implican el uso de un dermatoscopio, pueden ayudar a identificar lesiones sospechosas antes de que se vuelvan malignas.

FUENTE EL LITORAL