"Hay un montón de gente que no quiere a los transgénicos porque no entiende, así como no quieren una vacuna" comenzó afirmando. Y agregó que hay una fantasía sobre lo que es y lo que no es natural. "Hay mucha gente que cree que lo que comemos es natural sino es transgénico, y eso no es verdad. Nada de lo que comemos es natural ni estaba así en la naturaleza. Nada".

Según Chan, todo ha sido mejorado por técnicas clásicas: cruza, selección, "tirar a la basura lo que no quiero, etc." Y fue al grano, literalmente, al explicar la selección: "dos plantas tienen una serie de hijas, algunas más lindas, otras más feas. El productor se queda con las lindas, las cruza con otras lindas y así, a lo largo de 500 años de agricultura, tenemos lo que tenemos hoy en el súper".

Por si quedaban dudas, graficó explicando que "el maíz no existía en México: es hijo de las mutaciones del teocintle (son los antecesores directos de los cuales se domesticó el maíz como cultivo) . El brócoli no existía en la naturaleza, así como la coliflor, el kiwi y tantos otras frutas y verduras. Son producto del trabajo de mejoradores a lo largo de la historia".

La especialista disertó en INTA Rafaela. 

La científica explicó que está esa fantasía que si como no transgénico como natural. "En realidad uno come bastante bien, pero hay que diferenciar entre orgánico y natural. Natural no hay nada, y orgánico quiere decir que no se usó herbicida en su producción. El problema con lo orgánico (salvo para algunos cultivos que se han logrado) es que como se muere todo, porque las plantas son atacadas por hongos, insectos y malezas, la producción es muy baja y el costo es muy alto".

Y en este sentido, involucró un tema social, y económico. "Yo he visto que en París o Nueva York venden unas preciosas manzanas orgánicas, pero que cada una vale 5 Euros. ¿Quién puede pagar ese precio en Argentina? Entonces, no es que yo esté en contra de la producción orgánica, sino que mientras tenga esos costos, se nos va a morir de hambre más gente que hoy".

"Ecos y verdes"

En una afirmación contundente, fue más allá, y manifestó que los europeos perdieron la batalla contra los norteamericanos, porque los norteamericanos desarrollaron los transgénicos muchos antes. "Entonces inventaron esto de los verdes. Y se les fue la mano. Porque no lo pueden controlar. Entonces los europeos no usan transgénicos salvo en lugares muy acotados, pero sí usan glifosato, porque sí usan herbicida. Está la fantasía que lo que es europeo es natural, cuando a las malezas se las sacan igual de encima. Y cada 5 años renuevan el permiso por otros 5 años, porque por ahora la ciencia no ha podido encontrar algo mejor, con digo que no lo vaya a hacer en algún momento. Aleluya si se encuentra algo mejor".

Finalmente, a la hora de destacar la sinergia público privada que permitió descubrir el gen HB4, defendió el rol oficial. "El Estado también financió una parte, mi sueldo me lo paga el Estado, las becas de mis becarios y el instituto donde estoy, y eso hay que reconocerlo. Y eso fue una parte importante del desarrollo. El Estado invirtió en mi educación y la de mis becarios, en los institutos de ciencia que hoy tenemos".

Sin embargo, ratificó que sin la intervención de una empresa privada, no hubiese sido posible. "Lo que tiene el Estado es un dinámica de administración que es muy compleja para un desarrollo de esta características y que la empresa puede gerenciar de una forma muchísimo más eficiente (alquiler de campos, selección de personal, viajes al exterior, negociación con otras empresas, etc.). A eso lo podría hacer una empresa estatal, pero en este área no existe", sentenció.

Contexto de aprendizaje

El Lic. Cristian León (de la Agencia de extensión rural de INTA Rafaela), se mostró entusiasmado ante la presencia de Chan. "Estamos muy contentos, porque tuvimos la oportunidad de escuchar a la gran investigadora del Conicet que accedió gustosa a dar la charla".

En este sentido, remarcó que buscan demostrarle todas las investigaciones que realizó Raquel en los últimos años, "no sólo para nuestros compañeros de trabajo sino para toda la comunidad del departamento. Ella ha tenido mucho éxito sobre todo con el HB4 que le otorga tolerancia a la sequía al trigo, y lo sigue trabajando con otros cultivos".

Según León, el trabajo de Chan es inspirador dentro del Conicet y en la faz público privada. "Pude hablar con colegas, productores, docentes de universidades de la región, y todos les pareció una charla fantástica, muy didáctica, siendo que veces son temas que no son fáciles de entender, pero hizo un introducción técnica para explicar su trabajo, sus aciertos y errores, porque de eso se trata la ciencia, y salimos todos muy inspirados, viendo que con trabajo y dedicación se pueden lograr cosas importantes".

Por último, en cuanto al escenario que vive Rafaela en materia de normativas de los periurbanos, remarcó que "tenemos la nueve ordenanza, que si bien le quedan dos meses del veto propositivo, ayer se empezó a trabajar como para poder avanzar en esos primeros 200 metros (en especial en los 150 más alejados de la línea agronómica) con productos biológicos. Creemos que el trabajo interdisciplinario es lo mejor. Queremos producir en el periurbano con las Buenas Prácticas Agrícolas y el control del Estado".

Fuente:Campo Litoral