En el marco de una emotiva ceremonia de colación de la casa de estudios que se ubica en Bahía Blanca, provincia de Buenos Aires, uno de los jóvenes egresados conmovió a todos los presentes con un discurso lleno de gratitud, orgullo y reflexión.
"Llegué, abuelos": el emotivo discurso de un joven al graduarse como primer universitario de su familia
Una emotiva historia compartió la Universidad Nacional del Sur (UNS), digna de ser viralizada, por erigirse como una ejemplo del valor que las oportunidades educativas de la Argentina ofrecen a los jóvenes de este país actuando como motor de transformación social.
Emiliano Montero, oriundo de General Roca, Río Negro, se recibió de contador público y se convirtió en el primer graduado universitario de su familia. Al compartir su historia con un sentido discurso, se viralizó en las redes sociales como una muestra de superación y reflejo de esperanza de las tantas que pueblan las aulas de las universidades públicas argentinas.
“Hoy soy el primer graduado universitario de una familia de laburantes, personas que dejaron de lado sus propios intereses y prioridades para hacerse del mismo objetivo que el mío: finalizar los estudios”, expresó Emiliano al tomar la palabra frente a sus compañeros, familiares y autoridades de la UNS.
Con la voz entrecortada producto de la emoción, el joven recordó los sacrificios de sus seres queridos, especialmente de sus abuelos. “Vengo de una familia que construyó su vida fuera de las universidades. Mi abuela no pudo terminar la primaria; desde los 12 años tuvo que rebuscarse sola la vida, sin saber si al final del día tendría un plato de comida. Mi otra abuela llegó hasta segundo año de la secundaria y mi abuelo no terminó su primer año universitario. Mis padres comenzaron carreras universitarias, pero tampoco pudieron recibirse”, relató con emoción.
El camino de Emiliano no fue sencillo. Proveniente de una familia trabajadora, enfrentó numerosos desafíos para alcanzar su meta académica. Sin embargo, su determinación y el apoyo incondicional de su familia lo llevaron a cruzar la meta. Ese esfuerzo lo hizo discurso, refiriéndose a la importancia de la educación pública como pilar fundamental en su formación: “Nada de esto hubiera sido posible sin la UNS, sin una universidad pública. Es el único medio que tenemos, las familias y generaciones que venimos de abajo, para salir adelante y ofrecer un mejor puerto de partida a las generaciones venideras”.
Un sueño cumplido y lleno de gratitud
Uno de los momentos más emotivos del discurso fue cuando Emiliano recordó cómo, al inicio de su carrera, temía que el tiempo no le alcanzara para cumplir su promesa de graduarse mientras sus abuelos estuvieran presentes. “Cuando comencé la carrera, uno de mis mayores miedos era que el tiempo, tirano por su naturaleza, no me alcanzara para decirles: lo logré, llegué, tenés un nieto contador”, confesó.
Y a continuación agregó con gratitud: “Gracias por cada vela encendida, cada oración y cada gesto de apoyo que nos permitió llegar a donde hoy estamos. Este logro es nuestro, y también de ustedes”.
El joven, además, dedicó un párrafo especial a sus abuelos y los de todos sus compañeros, resaltando el acompañamiento familiar para logar el éxito académico: “Sé que muchos aquí también habrían querido compartir este logro con sus abuelos, así que quiero agradecerles a todos los abuelos, a quienes están acá y a quienes nos acompañan desde otro lugar. Gracias, en especial, a mis abuelos y a mi abuela que están mirando la ceremonia por YouTube”.
La universidad pública como motor de transformación social
Más allá de su logro personal, Emiliano aprovechó el momento para destacar el papel crucial de la universidad pública en la construcción de una sociedad más justa e inclusiva. “Me llena de orgullo decir: soy parte de la UNS. Las familias que venimos de abajo necesitamos estas oportunidades para salir adelante”, señaló.
También expresó su gratitud hacia la institución y quienes lo acompañaron durante su formación: “Gracias a bienestar, a la sala de lectura, a los amigos y compañeros, a los tutores y a los centros de estudiantes. Este logro no es solo mío, sino de todos los que me apoyaron en el camino”.
El acto de colación fue una celebración no solo para Emiliano y su familia, sino también para la comunidad educativa que lo vio crecer. Su historia es un recordatorio del impacto transformador de la educación pública y del poder de la perseverancia frente a las adversidades.
Fuente:El Litoral
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