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OPINIÓN

27 de enero de 2020

Tensión política santafesina

Claves. Pese al paso de las semanas no ceden los cortocircuitos entre oficialismo y oposición. El detrás de escena del pedido de emergencia y los cambios de estrategia con diputados e intendentes. Buena gira de Fernández

La canción sigue siendo la misma en Santa Fe. Se vive un clima de tensión política más intenso que en el resto de las provincias, y se repiten gestos, dichos y tirrias que van a condicionar el futuro mediato de la realidad local.

El gobierno volvió a la carga con la necesidad de tener para sí las emergencias en seguridad pero también las herramientas económicas y financieras. Para Omar Perotti, la emergencia en seguridad, sin la que tienen que ver con la caja, es un "instrumento rengo".

Aquella tentación primaria del peronismo en el gobierno de quebrar la disciplina de los 28 diputados opositores negociando con algunos radicales murió de nonato. Entonces, en el tablero de ajedrez apareció el ministro de Gobierno, Marcelo Borgonovo, reuniendo a algunos intendentes y bosquejando salidas a la crisis económica que padecen en los territorios. "Acá todos tenemos el mismo color: estamos en rojo y no por los flechazos del sol", dijo un jefe municipal.

"No le vamos a dar a Perotti ninguna atribución que contemple gobernar por decreto, pero estamos dispuestos a discutir todas las herramientas necesarias. No vamos a permitir que le saquen atribuciones a la Legislatura", resumió una fuente clave del Parlamento santafesino.

El color del dinero

Una buena señal, que calmó algunos ánimos, fue la decisión del gobierno de Perotti de pagar, ayer, los sueldos al Poder Legislativo y al Ejecutivo. Desde la Casa Gris brotó en las últimas horas un mensaje ciertamente polémico: "Si no hay emergencia no hay recursos para nadie. Y cuando se dice «para nadie» es para nadie".

En el Frente Progresista aducen que esa opción es inviable, que no se puede entrar en colisión con los otros poderes del Estado y que, en verdad, "el gobierno ya debe haberse nutrido de fondos porque frenó los gastos en obra pública desde diciembre". Todo lo contrario a lo que vocean desde el Ejecutivo, donde se repite como un mantra que le dejaron a Perotti la caja vacía.

La oposición está dispuesta a debatir algunas herramientas económicas y financieras, como por ejemplo las destinadas a recomponer el Fondo Unificado de Cuentas Oficiales (Fuco), pero no darle a Perotti atribuciones especiales "modificando las partidas".

En la oposición están enojados por el doble juego oficial. La táctica conciliadora de Borgonovo se da de bruces con los periódicos juicios de valor del ministro de Seguridad, Marcelo Saín, quien en las últimas horas volvió a poner el foco en lo vínculos supuestamente delictuales de "un bloque interpartidario", en referencia, se supone, a sectores del socialismo, el radicalismo e, incluso, el peronismo.

De todos modos, lo que dice Saín no nace de un repollo: tiene que ver con el discurso de Perotti ante la Asamblea Legislativa, el día de su asunción, cuando habló de "un pacto de gobernabilidad con el delito" de parte del gobierno saliente. En medio de toda esa pirotecnia discursiva la oposición tendría que votarle la emergencia al gobierno. Los días por venir serán claves.

Toda la discusión por la emergencia pospone el análisis sobre algunas cuestiones políticas que van a sobrevenir en los próximos meses en la provincia de Santa Fe. No es un dato menor en ese sentido la pésima relación entre gobierno y oposición. La Legislatura será el ámbito de debate de casi todos los temas, especialmente de una posible convocatoria a reforma constitucional. Allí estará o no la llave del futuro político. Habrá más noticias para este boletín.

La crisis política santafesina poco tiene que ver con el horizonte nacional, donde Alberto Fernández y Cristina Kirchner han logrado eclipsar (al menos por ahora) los pronósticos de relación destemplada. Cristina volvió a ser presidenta por unas horas y dio dos señales claras de que no quiere ser el foco de la polémica: firmó el acta de traspaso en el instituto Patria y la primera reunión por esas horas fue con Eduardo Duhalde. Un mensaje de unidad en clave peronista.

   

 

Desde hace un tiempo los analistas políticos deben mirar más a Máximo Kirchner que a Cristina. O a Cristina en relación a su hijo. El mal inicio de gestión de Axel Kicillof sembró de temores al peronismo kirchnerista y amplió el zoom a futuro sobre Máximo. El horizonte de ese espacio dependerá de esos dos nombres.

En el mientras tanto de su gestión, a la par de la negociación de la deuda, Fernández tendrá que ir construyendo fernandismo. Ese mix de peronismo porteño de los 90 y Frepaso también noventista puede servir como embrión, pero el presidente necesitará (y mucho) de los gobernadores para ir construyendo su futura acción política.

Al menos en sus primeros pasos internacionales, el jefe del Estado se manejó con una lógica impecable en la elección de su destino. La excursión a Israel cayó bien y dio señales de previsibilidad en los círculos que serán trascendentes para las futuras negociaciones por la deuda y las inversiones.

el peronismo nacional goza de los beneficios de tener una oposición en proceso de reorganización, sin liderazgos a la vista por afuera de Mauricio Macri, quien volvió de las vacaciones para ponerse al frente del PRO y esperar las definiciones en el radicalismo. No será de tránsito fácil la convivencia en el interior de Juntos por el Cambio.

Pasaron menos de dos meses desde la puesta en marcha de los gobiernos. Y parece una eternidad.

Propietario: EDITORIAL DIARIO LA CAPITAL S.A. inscripta en la Sección Estatutos del Registro Público de Comercio de Rosario al T° 80 F° 3602 N° 197 en fecha 19 de mayo de 1999. Dirección Nacional del Derecho de Autor (Expte. N° 49995792). Prohibida toda reproducción total o parcial del contenido de este diario. Dirección, redacción, comercial, circulación y administración: Sarmiento 763, Rosario, CP 2000, provincia de Santa Fe. Presidente y Director de la publicación: Gustavo Santiago Scaglione.

La canción sigue siendo la misma en Santa Fe. Se vive un clima de tensión política más intenso que en el resto de las provincias, y se repiten gestos, dichos y tirrias que van a condicionar el futuro mediato de la realidad local.

El gobierno volvió a la carga con la necesidad de tener para sí las emergencias en seguridad pero también las herramientas económicas y financieras. Para Omar Perotti, la emergencia en seguridad, sin la que tienen que ver con la caja, es un "instrumento rengo".

Aquella tentación primaria del peronismo en el gobierno de quebrar la disciplina de los 28 diputados opositores negociando con algunos radicales murió de nonato. Entonces, en el tablero de ajedrez apareció el ministro de Gobierno, Marcelo Borgonovo, reuniendo a algunos intendentes y bosquejando salidas a la crisis económica que padecen en los territorios. "Acá todos tenemos el mismo color: estamos en rojo y no por los flechazos del sol", dijo un jefe municipal.

"No le vamos a dar a Perotti ninguna atribución que contemple gobernar por decreto, pero estamos dispuestos a discutir todas las herramientas necesarias. No vamos a permitir que le saquen atribuciones a la Legislatura", resumió una fuente clave del Parlamento santafesino.

El color del dinero

Una buena señal, que calmó algunos ánimos, fue la decisión del gobierno de Perotti de pagar, ayer, los sueldos al Poder Legislativo y al Ejecutivo. Desde la Casa Gris brotó en las últimas horas un mensaje ciertamente polémico: "Si no hay emergencia no hay recursos para nadie. Y cuando se dice «para nadie» es para nadie".

En el Frente Progresista aducen que esa opción es inviable, que no se puede entrar en colisión con los otros poderes del Estado y que, en verdad, "el gobierno ya debe haberse nutrido de fondos porque frenó los gastos en obra pública desde diciembre". Todo lo contrario a lo que vocean desde el Ejecutivo, donde se repite como un mantra que le dejaron a Perotti la caja vacía.

La oposición está dispuesta a debatir algunas herramientas económicas y financieras, como por ejemplo las destinadas a recomponer el Fondo Unificado de Cuentas Oficiales (Fuco), pero no darle a Perotti atribuciones especiales "modificando las partidas".

En la oposición están enojados por el doble juego oficial. La táctica conciliadora de Borgonovo se da de bruces con los periódicos juicios de valor del ministro de Seguridad, Marcelo Saín, quien en las últimas horas volvió a poner el foco en lo vínculos supuestamente delictuales de "un bloque interpartidario", en referencia, se supone, a sectores del socialismo, el radicalismo e, incluso, el peronismo.

De todos modos, lo que dice Saín no nace de un repollo: tiene que ver con el discurso de Perotti ante la Asamblea Legislativa, el día de su asunción, cuando habló de "un pacto de gobernabilidad con el delito" de parte del gobierno saliente. En medio de toda esa pirotecnia discursiva la oposición tendría que votarle la emergencia al gobierno. Los días por venir serán claves.

Toda la discusión por la emergencia pospone el análisis sobre algunas cuestiones políticas que van a sobrevenir en los próximos meses en la provincia de Santa Fe. No es un dato menor en ese sentido la pésima relación entre gobierno y oposición. La Legislatura será el ámbito de debate de casi todos los temas, especialmente de una posible convocatoria a reforma constitucional. Allí estará o no la llave del futuro político. Habrá más noticias para este boletín.

La crisis política santafesina poco tiene que ver con el horizonte nacional, donde Alberto Fernández y Cristina Kirchner han logrado eclipsar (al menos por ahora) los pronósticos de relación destemplada. Cristina volvió a ser presidenta por unas horas y dio dos señales claras de que no quiere ser el foco de la polémica: firmó el acta de traspaso en el instituto Patria y la primera reunión por esas horas fue con Eduardo Duhalde. Un mensaje de unidad en clave peronista.

   

 

Desde hace un tiempo los analistas políticos deben mirar más a Máximo Kirchner que a Cristina. O a Cristina en relación a su hijo. El mal inicio de gestión de Axel Kicillof sembró de temores al peronismo kirchnerista y amplió el zoom a futuro sobre Máximo. El horizonte de ese espacio dependerá de esos dos nombres.

En el mientras tanto de su gestión, a la par de la negociación de la deuda, Fernández tendrá que ir construyendo fernandismo. Ese mix de peronismo porteño de los 90 y Frepaso también noventista puede servir como embrión, pero el presidente necesitará (y mucho) de los gobernadores para ir construyendo su futura acción política.

Al menos en sus primeros pasos internacionales, el jefe del Estado se manejó con una lógica impecable en la elección de su destino. La excursión a Israel cayó bien y dio señales de previsibilidad en los círculos que serán trascendentes para las futuras negociaciones por la deuda y las inversiones.

el peronismo nacional goza de los beneficios de tener una oposición en proceso de reorganización, sin liderazgos a la vista por afuera de Mauricio Macri, quien volvió de las vacaciones para ponerse al frente del PRO y esperar las definiciones en el radicalismo. No será de tránsito fácil la convivencia en el interior de Juntos por el Cambio.

Pasaron menos de dos meses desde la puesta en marcha de los gobiernos. Y parece una eternidad.

Propietario: EDITORIAL DIARIO LA CAPITAL S.A. inscripta en la Sección Estatutos del Registro Público de Comercio de Rosario al T° 80 F° 3602 N° 197 en fecha 19 de mayo de 1999. Dirección Nacional del Derecho de Autor (Expte. N° 49995792). Prohibida toda reproducción total o parcial del contenido de este diario. Dirección, redacción, comercial, circulación y administración: Sarmiento 763, Rosario, CP 2000, provincia de Santa Fe. Presidente y Director de la publicación: Gustavo Santiago Scaglione.

 

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