Jueves 28 de Marzo de 2024

Hoy es Jueves 28 de Marzo de 2024 y son las 19:35 -

SOCIEDAD

20 de mayo de 2017

Rosario: 300 mujeres son asistidas por violencia de género

Son casos en los que debe actuar un equipo de profesionales del municipio. Bajó la edad de las víctimas: tienen entre 16 y 35 años.

El municipio interviene por mes en más de 300 casos de mujeres que requieren asistencia ya que atraviesan situaciones de violencia de género, una problemática que hace una década afectaba en Rosario a una franja etaria de entre 30 y 55 años y que ahora la padecen chicas desde la adolescencia hasta los 35.

Milagros, la joven de 18 años que el jueves pasado quedó detenida bajo custodia en un área municipal tras haber asesinado a su ex pareja, es una de esos tantos casos. Se le colocó una tobillera electrónica para poder monitorear sus movimientos y no se la mandó a una prisión porque tiene a su cargo un niño de algo más de un año y cursa un embarazo de pocos meses.

De acuerdo al relato de los operadores territoriales con los que abordaba su problemática de violencia de género desde hace un año y medio, el crimen de su ex pareja fue el epílogo dramático de una historia lacerante y llena de ausencias.

La joven es sólo un ejemplo de los 300 casos mensuales de mujeres que deben ser asistidas en Rosario por el Estado ya que atraviesan situaciones de violencia de género. "Los pedidos de asistencia y auxilio ingresan por tres vías: mediante la denuncia al teléfono verde (atendido por psicólogas, trabajadoras sociales y abogadas) que evalúan la situación planteada y sus posibles riesgos; mediante el Plan Nueva Oportunidad y a través de una línea institucional a la cual llegan datos aportados por Ong's, gremios y clubes, entre otras entidades", explicó la titular de la Dirección de Atención en Violencia de Género del municipio, Lucrecia Donoso.

Según detalló, en el teléfono verde las llamadas vienen en aumento: en enero de 2016 hubo 575 llamadas y en el mismo mes de este año treparon a 891.

En febrero de este año, en tanto, fueron 771 y en marzo 905. "De todas esas llamadas hay un promedio que ronda las 300 mensuales en las que es necesario un abordaje de la situación de violencia de género por parte de los equipos profesionales", señaló la funcionaria.

Hay otro dato que pone de relieve el crecimiento de la violencia urbana y la vulnerabilidad de la población conformada por jóvenes que generalmente pueblan las barriadas más humildes de la ciudad. "La franja etaria de mujeres afectadas por la violencia de género está disminuyendo. Hace una década las víctimas tenían entre 30 y 55 años que en su mayoría tenían más de diez años de convivencia con el hombre que las sometía hasta que decidían exponer esa realidad", indicó Donoso.

Hoy la población afectada está compuesta por chicas adolescentes y de hasta 35 años. "Vivimos en una sociedad cada vez más violenta y esta es una problemática en la que se debe involucrar toda la sociedad, ya que es un flagelo que nos afecta a todos", indicó.

A su entender, Milagros había querido romper ese entorno violento y "terminó dentro de una paradoja. Fue su vida o la de su ex pareja". Desde el jueves está con prisión domiciliaria y lleva colocada una tobillera electrónica.

Milagros, la joven que "sólo aprendió la pedagogía de la crueldad"

Milagros, la joven que quedó detenida el jueves pasado acusada de haber asesinado de tres disparos a su ex pareja, no era una desconocida para el Estado provincial y municipal. Se había sumado hace un año y medio al Programa Nueva Oportunidad, un plan que tiene por objetivo formar en oficios y regresar a la educación formal a jóvenes en riesgo social.

"Estamos hablando de una nena, porque de hecho no es más que eso a los 18 años, que creció en un contexto en el que sólo aprendió la pedagogía de la crueldad", señaló sin rodeos la titular de la Dirección de Atención en Violencia de Género del municipio, Lucrecia Donoso.

 El dato abre la puerta a la historia de la joven que el 16 de abril le pegó tres tiros a su ex pareja, Ignacio Oro, un muchacho de 20 años (con presuntos nexos con redes delictivas) que era el padre del bebé que está gestando, y que falleció veinte días después tras agonizar conectado a un respirador artificial.

 Según narraron los operadores territoriales consultados, Milagros había sido detectada hace un año y medio como parte de los jóvenes en riesgo social sobre los que pone la lupa el programa Nueva Oportunidad.

 El plan, que tiene por objetivo formar en oficios a estos chicos y regresarlos a la educación formal en un intento por extraerlos de entornos violentos que golpean a los barrios más humildes, la vio incorporarse con gusto a un taller de fotografía que se dictó en el barrio Toba de Rouillón al 4300.

 "Allí asistió regularmente y tuvo una conducta muy buena", detalló el director del Programa Nueva Oportunidad, Luciano Vigoni.

Según explicó, el Plan Nueva Oportunidad tiene un espacio que se denomina "tercer tiempo" en el cual los jóvenes abordan junto a sus acompañantes diversas temáticas como sexualidad, violencia de género, derechos humanos y educación. Se lleva adelante por fuera de los días de capacitación en oficios. En ese espacio, Milagros contó que su pareja la sometía a malos tratos.

Miedo

"Milagros siempre habló del miedo. Es una chica que está cursando un embarazo adolescente, que ya tiene un nene de algo más de un año y cuya madre también había sido víctima de violencia de género. Aún así, apostó a la familia, terminó con ese vínculo de violencia y estaba llevando adelante un embarazo y criando a su otro hijo", detalló Donoso.

Su buena predisposición a sumarse al Nueva Oportunidad, la conducta y el cumplimiento habían incidido para que los operadores territoriales la recomendaran para ser incorporada a una cooperativa, en la que trabajaba desde hacía varios meses.

Según Donoso, su ex pareja irrumpió en su domicilio y al defenderse Milagros lo terminó asesinado. Para la Fiscalía, la chica lo fue a buscar y lo baleó cuando el joven estaba con su nueva novia.

 Algo es seguro. "Este es un desenlace muy triste y dramático que no tendría que haber ocurrido. Como sociedad debemos darle otra oportunidad. Los hijos de Milagros merecen otro destino", remarcó Donoso.

0800-444-0420 - Teléfono verde. El municipio recepciona las denuncias las 24 horas.

El municipio interviene por mes en más de 300 casos de mujeres que requieren asistencia ya que atraviesan situaciones de violencia de género, una problemática que hace una década afectaba en Rosario a una franja etaria de entre 30 y 55 años y que ahora la padecen chicas desde la adolescencia hasta los 35.

Milagros, la joven de 18 años que el jueves pasado quedó detenida bajo custodia en un área municipal tras haber asesinado a su ex pareja, es una de esos tantos casos. Se le colocó una tobillera electrónica para poder monitorear sus movimientos y no se la mandó a una prisión porque tiene a su cargo un niño de algo más de un año y cursa un embarazo de pocos meses.

De acuerdo al relato de los operadores territoriales con los que abordaba su problemática de violencia de género desde hace un año y medio, el crimen de su ex pareja fue el epílogo dramático de una historia lacerante y llena de ausencias.

La joven es sólo un ejemplo de los 300 casos mensuales de mujeres que deben ser asistidas en Rosario por el Estado ya que atraviesan situaciones de violencia de género. "Los pedidos de asistencia y auxilio ingresan por tres vías: mediante la denuncia al teléfono verde (atendido por psicólogas, trabajadoras sociales y abogadas) que evalúan la situación planteada y sus posibles riesgos; mediante el Plan Nueva Oportunidad y a través de una línea institucional a la cual llegan datos aportados por Ong's, gremios y clubes, entre otras entidades", explicó la titular de la Dirección de Atención en Violencia de Género del municipio, Lucrecia Donoso.

Según detalló, en el teléfono verde las llamadas vienen en aumento: en enero de 2016 hubo 575 llamadas y en el mismo mes de este año treparon a 891.

En febrero de este año, en tanto, fueron 771 y en marzo 905. "De todas esas llamadas hay un promedio que ronda las 300 mensuales en las que es necesario un abordaje de la situación de violencia de género por parte de los equipos profesionales", señaló la funcionaria.

Hay otro dato que pone de relieve el crecimiento de la violencia urbana y la vulnerabilidad de la población conformada por jóvenes que generalmente pueblan las barriadas más humildes de la ciudad. "La franja etaria de mujeres afectadas por la violencia de género está disminuyendo. Hace una década las víctimas tenían entre 30 y 55 años que en su mayoría tenían más de diez años de convivencia con el hombre que las sometía hasta que decidían exponer esa realidad", indicó Donoso.

Hoy la población afectada está compuesta por chicas adolescentes y de hasta 35 años. "Vivimos en una sociedad cada vez más violenta y esta es una problemática en la que se debe involucrar toda la sociedad, ya que es un flagelo que nos afecta a todos", indicó.

A su entender, Milagros había querido romper ese entorno violento y "terminó dentro de una paradoja. Fue su vida o la de su ex pareja". Desde el jueves está con prisión domiciliaria y lleva colocada una tobillera electrónica.

Milagros, la joven que "sólo aprendió la pedagogía de la crueldad"

Milagros, la joven que quedó detenida el jueves pasado acusada de haber asesinado de tres disparos a su ex pareja, no era una desconocida para el Estado provincial y municipal. Se había sumado hace un año y medio al Programa Nueva Oportunidad, un plan que tiene por objetivo formar en oficios y regresar a la educación formal a jóvenes en riesgo social.

"Estamos hablando de una nena, porque de hecho no es más que eso a los 18 años, que creció en un contexto en el que sólo aprendió la pedagogía de la crueldad", señaló sin rodeos la titular de la Dirección de Atención en Violencia de Género del municipio, Lucrecia Donoso.

 El dato abre la puerta a la historia de la joven que el 16 de abril le pegó tres tiros a su ex pareja, Ignacio Oro, un muchacho de 20 años (con presuntos nexos con redes delictivas) que era el padre del bebé que está gestando, y que falleció veinte días después tras agonizar conectado a un respirador artificial.

 Según narraron los operadores territoriales consultados, Milagros había sido detectada hace un año y medio como parte de los jóvenes en riesgo social sobre los que pone la lupa el programa Nueva Oportunidad.

 El plan, que tiene por objetivo formar en oficios a estos chicos y regresarlos a la educación formal en un intento por extraerlos de entornos violentos que golpean a los barrios más humildes, la vio incorporarse con gusto a un taller de fotografía que se dictó en el barrio Toba de Rouillón al 4300.

 "Allí asistió regularmente y tuvo una conducta muy buena", detalló el director del Programa Nueva Oportunidad, Luciano Vigoni.

Según explicó, el Plan Nueva Oportunidad tiene un espacio que se denomina "tercer tiempo" en el cual los jóvenes abordan junto a sus acompañantes diversas temáticas como sexualidad, violencia de género, derechos humanos y educación. Se lleva adelante por fuera de los días de capacitación en oficios. En ese espacio, Milagros contó que su pareja la sometía a malos tratos.

Miedo

"Milagros siempre habló del miedo. Es una chica que está cursando un embarazo adolescente, que ya tiene un nene de algo más de un año y cuya madre también había sido víctima de violencia de género. Aún así, apostó a la familia, terminó con ese vínculo de violencia y estaba llevando adelante un embarazo y criando a su otro hijo", detalló Donoso.

Su buena predisposición a sumarse al Nueva Oportunidad, la conducta y el cumplimiento habían incidido para que los operadores territoriales la recomendaran para ser incorporada a una cooperativa, en la que trabajaba desde hacía varios meses.

Según Donoso, su ex pareja irrumpió en su domicilio y al defenderse Milagros lo terminó asesinado. Para la Fiscalía, la chica lo fue a buscar y lo baleó cuando el joven estaba con su nueva novia.

 Algo es seguro. "Este es un desenlace muy triste y dramático que no tendría que haber ocurrido. Como sociedad debemos darle otra oportunidad. Los hijos de Milagros merecen otro destino", remarcó Donoso.

0800-444-0420 - Teléfono verde. El municipio recepciona las denuncias las 24 horas.

 

FUENTE: LA CAPITAL

COMPARTIR:

Comentarios

Escribir un comentario »

Aun no hay comentarios, sé el primero en escribir uno!